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Telesur
El Gobierno de Venezuela, así como también otras organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales, han rechazado el informe emitido por la Oficina de la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), Michelle Bachelet, sobre la situación del país suramericano.
En dicho informe, se realizaron más de 20 recomendaciones al Gobierno que preside Nicolás Maduro en el reporte que presentó el pasado 4 de julio, haciendo caso omiso a los numerosos avances que ha tenido la gestión del mandatario venezolano en materia de derechos humanos.
De igual forma, se dejaron sin mención los intentos desestabilizadores y violentos, gestados por sectores de la oposición venezolana.
Víctimas de violencia
La Fundación Latinoamericana por los Derechos Humanos y el Desarrollo Social (Fundalatin) emitió unas declaraciones sobre el informe, en las que ratificó que el primer punto que Bachelet omitió fueron las víctimas de los hechos violentos registrados en el país durante 2013, 2014 y 2017, donde más de 100 ciudadanos fueron quemados y agredidos por ser identificados como “chavistas” en el este de la capital.
“El informe de la alta comisionada invisibilizó a todas estas víctimas, así como lo hizo su antecesor. Lamentablemente las esperanzas de las víctimas han sido defraudadas por su oficina, a pesar de comprometerse a dar un tratamiento imparcial a este tema”, señaló Fundalatin durante su intervención en la ONU el pasado 5 de julio.
En este sentido, la presidenta de esta ONG, María Eugenia Russián, recordó que Bachelet conversó con la madre de Orlando Figuera, “quien fue linchado y quemado vivo, y también escuchó al padre de Elvis Durán, degollado por sectores antigubernamentales, pero no hay ninguna referencia de ellos en el informe”, según la funcionaria.
Avances en DD.HH.
Russián rechazó que no se mencione en el informe los progresos de Venezuela en materia de derechos humanos, uno de los temas que viene registrando la ONG en sus reportes ante las Naciones Unidas.
“Fundalatin tiene 41 años trabajando en las comunidades más deprimidas del país y hemos documentado cada una de las políticas que han permitido sacar de la pobreza a sectores que eran excluidos de la inversión estatal. Todavía queda mucho por hacer, pero ningún balance objetivo de la situación venezolana puede obviar esta realidad”, afirmó la presidenta de la ONG.
