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La Habana/AFP
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, viajó a La Habana para recibir el «firme respaldo» de sus aliados del bloque izquierdista del Alba frente a las sanciones de varios países contra su gobierno.
Al término de una reunión del bloque de inspiración socialista, lanzado hace 13 años por Hugo Chávez y Fidel Castro, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) renovó su «firme respaldo» a Maduro ante las sanciones financieras de Estados Unidos, que lo acusa de actuar como un «dictador».
«Rechazamos las sanciones económicas impuestas por los Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea con fines políticos, contra (…) Venezuela, que afectan la vida y el desarrollo del noble pueblo venezolano y el goce de sus derechos», señala una declaración emitida en La Habana.
Asimismo, el texto condenó «las acciones injerencistas de la OEA y de grupos de países por sus continuas agresiones contra la soberanía, autodeterminación y el orden constitucional» del país sudamericano.
Los aliados de Caracas también dieron su respaldo al diálogo iniciado a principios de este mes en República Dominicana entre el gobierno y la oposición venezolana, y exhortaron «a la comunidad internacional a apoyar este proceso», sin «injerencia, condicionamiento o presión externa».
Seis meses después de una ola de protestas que exigieron su partida y preocuparon a la comunidad internacional por su nivel de violencia -dejaron 125 muertos-, Maduro parece haber recuperado el control del poder en su país, que está al borde del colapso económico.
Fortalecido con un triunfo en las elecciones de alcaldes del domingo, el líder venezolano busca su reelección en 2018 con la vía despejada tras amenazar ese mismo día a los principales partidos opositores, que no concurrieron a los comicios municipales, con excluirlos de las presidenciales.
En el discurso que selló la reunión, Maduro condenó «el recrudecimiento (…) de la persecución obsesiva y enfermiza» de Washington, que ha impuesto sanciones financieras contra Caracas, al igual que Canadá y la Unión Europea, pero subrayó que «el imperialismo no ha podido asfixiarnos ni podrá con la revolución bolivariana».
El gobierno de Donald Trump ha acusado varias veces a Maduro de haber instaurado una «dictadura» en Venezuela con el apoyo de una Asamblea Nacional Constituyente totalmente oficialista, cuya elección Washington considera fraudulenta, y que rige con poderes absolutos desde agosto.
Al ALBA es un proyecto regional de integración económica y política, integrado por Ecuador, Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua y varios pequeños países del Caribe.
