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Cristina Cornejo presidenta de “Las Mélidas”; Sofía Alvarado de Cabrera, (UES/ testigo de honor); y Santiago Díaz, presidente de APROCSAL, firman un convenio en el marco del proyecto “Mujeres Empoderadas por la Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos y la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres”. Foto Diario Co Latino/Gloria Silvia Orellana

Las Mélidas y APROCSAL se pronuncian por la erradicación de violencia contra las mujeres

Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino

“Estamos aquí para la firma de un convenio de corresponsabilidad, para desarrollar acciones y estrategias por los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, a fin de erradicar la violencia contra las mujeres”, dijo Azucena Ortíz, directora del Movimiento de Mujeres Mélida Anaya Montes, en la apertura de firma de convenio entre Las Mélidas y APROCSAL.

La normalización de la violencia contra las mujeres en cualquiera de sus manifestaciones y la impunidad de los agresores en el sistema Judicial, impulsó al Movimiento de Mujeres Mélida Anaya Montes, “Las Mélidas”, y la Asociación de Promotores Comunales Salvadoreños (APROCSAL), a desarrollar el proyecto “Empoderamiento de Mujeres para la Defensa de sus Derechos Sexuales y Derechos Reproductivos”.

Esta iniciativa cuenta con el acompañamiento del Observatorio de Políticas Pública de Salud (OPPS), la Facultad de Medicina de la Universidad de El Salvador (UES) y Medicus Mundi, por el transcurso de dos años, en la que darán prioridad el respeto al derecho de las mujeres a salud sexual y reproductiva y el derecho a una vida libre de violencia.

“Nuestro trabajo estará enmarcado en fortalecer la organización de las mujeres, fortalecer su empoderamiento y lograr que las mujeres a quienes vamos a llegar con diferentes estrategias en el marco de esta iniciativa para que ellas, tengan una vida digna al alcanzar sus autonomías de vida. Esperamos hacer una labor y generar sensibilización en las instancias de decisión política con respecto a los temas de los derechos de las mujeres, en específico los derechos sexuales y reproductivos y erradicación de la violencia”, explicó Ortiz.

Sobre el proyecto, Mirella Melgar, representante de Medicus Mundi Guipúzcoa y el Gobierno Vasco, financista del proyecto, dijo que será realizado en el departamento de San Salvador, en los municipios de Cuscatancingo, San Marcos, Mejicanos, Ayutuxtepeque, Ilopango, San Martín y Soyapango, así generar incidencia en diversos ámbitos como el político, territorial y académicos, que puedan trascender a la contraloría social en la implementación de políticas públicas que dan cobertura nacional.

“Es una respuesta al objetivo que se planteó -mujeres empoderadas- en su defensa de derechos sexuales y reproductivos. Hacer un trabajo muy fuerte de formación con las mujeres, pero también buscando alianzas en este proceso. Creo que la academia es aliada fundamental en el proceso que estamos viviendo, cuando la vulneración de los derechos de la mujer está a la orden del día. Y los medios de comunicación que deberían unirse a nuestras organizaciones y denunciar la violencia, a poner el tema en agenda nacional, para que esto ya no se permita en el país; no como notas virales en las redes, sino creando conciencia, que la gente esté clara que muchas mujeres mueren producto de la violencia”, argumentó Melgar.

El proyecto, aunque inició en diciembre del año pasado, este día se firma para dar marcha oficial a las acciones en el territorio. Un proyecto que cuenta con una inversión total 714 mil euros; de los cuales la Agencia Vasca para la Cooperación del Desarrollo, dará un aporte más de medio millón de euros y por parte de Las Mélidas, APROCSAL y otros financistas aportarán alrededor de 143,000 euros, para el proyecto.

“Creemos que es una cifra baja, porque abordar el problema de la violencia contra las mujeres, requiere no solo inversión económica, sino también, voluntades políticas; pero lo vemos como una semilla para iniciar la lucha contra ese flagelo de la violencia contra la mujer; seleccionamos el departamento de San Salvador, por los altos niveles de violencia que registra y los municipios priorizados tienen altos índices de violencia. Hemos dicho, nos vamos a meter de cabeza en uno de los departamentos más duros y difíciles del país, con lo que pretendemos dar una cuota o mejora en los derechos sexuales y reproductivos, así como la erradicación de la violencia contra la mujer”, agregó.

Entre los resultados que esperan en los próximos dos años es colocar en el debate público los derechos de las mujeres, la contraloría social a la atención en salud sexual y reproductiva que se le brinda a las mujeres, así como diplomados universitarios en estos derechos y la evaluación desde la academia sobre la aplicación de la Ley Integral para una Vida Libre de Violencia a las Mujeres (LEIV), entre otros objetivos.

“En la cuarentena el alza de feminicidios y hechos de violencia contra la mujer se ha disparado. Y aunque el Ministerio de Salud, no quiera reconocer oficialmente se ha elevado el embarazo adolescente; así como la mortalidad materna, es otro indicador bien delicado. Ha habido un retroceso en los avances que teníamos en materia de salud y derechos sexuales y reproductivos de las mujeres debido a la cuarentena. Entonces, debemos de volver a exhortar a las instancias que les corresponde la agenda de los derechos de las mujeres y que cumplan la política pública y seremos las mujeres la que lo exigiremos”, sostuvo Melgar.

La firma del convenio estuvo a cargo de la presidenta de Las Mélidas, Cristina Cornejo; Santiago Díaz, presidente de APROCSAL, y como testigo de honor Sofía Alvarado de Cabrera, de la Facultad de Medicina, Universidad de El Salvador, quienes señalaron la relevancia de unir esfuerzos y dar aportes para la población mayoritaria del país.

“El compromiso al estampar nuestras firmas, por los derechos a la salud sexual y empoderamiento de las mujeres, son luchas que debemos ir haciendo, que son cosas de las que nadie habla en este país, como obligar a niñas a ser madres debido a abusos y eso debemos de erradicarlo”, manifestó Cristina Cornejo.

Mientras, Santiago Díaz (APROCSAL) consideró que el convenio al final iba a unir saberes y experiencias de ambas organizaciones de la sociedad civil, que ya cuentan con una trayectoria de décadas en defensa de derechos elementales de la población.

“Me siento contento con este convenio, porque esto nos genera varios elementos como la educación y prevención para estos derechos; y segundo esto también, no solo genera conciencia en las involucradas, sino en el resto de la gente que no sabe como se garantizan estos derechos”, puntualizó.

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