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Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
Ante esto, a través de un comunicado, Leonel Flores denunció que Sidney Blanco está abusando de su poder, al señalar y cuestionar sin justificación alguna, que Flores recibía fondos de la Partida Secreta de Casa Presidencial, al promover en primer lugar un proceso que se ha venido manejado en forma arbitraria y al antojo de “su olfato”.
El ex director del ISSS advirtió que la intención del magistrado es coaccionar indirectamente a la Cámara Segunda de lo Civil, para condenarle, por lo que espera que prevalezca la razón y la justicia… y no el resentimiento y venganza.
“Desde el inicio el proceso iba viciado de odio y venganza, no sé si hacia mi persona o a la del ex presidente de la república Mauricio Funes. En los pasillos de la corte ya se decía –sin fundamento alguno- que dicho magistrado aseguraba que este servidor se había beneficiado de la hacienda pública, como director del Instituto Salvadoreño del Seguro Social ISSS”, afirma Flores.
Flores enfrenta un proceso civil, presuntamente al no poder justificar $600 mil dólares de su patrimonio, cantidad que afirma tener las pruebas para demostrar su inocencia.
“Hoy resulta que el magistrado Sídney Blanco lanza otro ataque ridículo acusándome de haber recibido dinero de la partida secreta de casa presidencial –la que ellos mismos la declararon inconstitucional- asumiendo como prueba las transferencias que hice a mis hijos para su manutención. El origen de estos fondos ha sido acreditado ante la instancia correspondiente, no tengo por qué arrodillarme ante el magistrado y darle explicaciones pues el caso no está en su sede judicial”, recalcó Flores.
Para Flores, las declaraciones del magistrado Sídney Blanco son “absolutamente irresponsables y un abuso de la magistratura que ostenta”; no obstante, Flores denunció que “diversas fuentes afirman que hay un resentimiento sembrado desde mi rol de activista en Estados Unidos y otras por sus aspiraciones de llegar a un cargo público en el exterior. No lo sé, ni me interesa, pero me gustaría ver al magistrado de la Sala Constitucional presentar pruebas de todo lo que afirma, ya que hasta el momento sus manifestaciones solo son un abuso del micrófono, de su ansiedad por ascender a mejores cargos, y del poder que actualmente la Asamblea Legislativa le ha dado para administrar justicia, no para abusar de ella”.
El ex director del ISSS recuerda que se ha buscado por todas partes involucrarlo en el cometimiento de ilícitos, desde la sección de probidad, que no se le permitió defenderse, y ahora con los nuevos señalamientos mientras se desarrolla el proceso en la Cámara Segunda de lo Civil.
“Desde las primeras pesquisas se dieron cuenta que no hay faltante alguno en la institución que representé. Luego, se manejó la idea que era una especie de “testaferro” del ex presidente Mauricio Funes, pero cuando buscaron hasta debajo de las piedras y no me encontraron cuentas no justificadas en el extranjero, propiedades, empresas, ni mucho menos mi nombre prestado a nadie, comenzaron a vincularme con venta y compra de vehículos como si esto fuera pecado”, agregó.
Ante lo anterior, Flores hizo un llamado a la Justicia de El Salvador, a la Procuraduría de los Derechos Humanos, a la Comisión Internacional de Derechos Humanos y al pueblo salvadoreño en general a detener este tipo de abusos de poder del magistrado Sídney Blanco y para que no se permitan más ataques personales o por “olfato”.
