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Yaneth Estrada
@caricheop
La implementación de nuevos horarios de entrada de 8.30 a.m. y de salida 4:30 p.m. en instituciones de Gobierno, para descongestionar el tráfico, generó buenas expectativas en la población que anticiparon la llegada a sus lugares de destino, entre 5, 10 y 15 minutos.
Según el acuerdo número 681 del Ministerio de Hacienda, se aprueba la implementación de dichos horarios y aplica únicamente para los empleados de ministerios, exceptuando hospitales, policía, ejército y aquellas entidades que tengan disposiciones especiales.
Hoy, en su primer día de aplicación, cerca del Central de Señoritas en San Salvador, encontramos a Eduardo Pichinte, un trabajador que viaja todos los días desde San Martín a la capital, con tiempo promedio de 45 ó 50 minutos, pero este lunes tuvo la sorpresa de llegar en 35 minutos.
“Lo más difícil siempre es el Bulevar del Ejército. Para llegar a las 8:30 al trabajo debo salir tipo 6:30 de la mañana, creo que esta medida es buena porque hubo mejoría, aunque todavía falta más organización”, dijo Pichinte, mientras esperaba a su hermana.
Adriana Cuevas, una vendedora de café y pan dulce, que se conduce de Merliot hacia San Salvador a las 5:00 de la mañana, consideró que “no vio mejoría porque generalmente vengo muy temprano, creo que me tardé lo mismo”.
Por su parte, Gabriela Hércules, una estudiante de medicina, aseguró que el tráfico desde su hogar en la Tutunichapa hasta los alrededores del Centro de Gobierno, es un caos en las mañanas. “De lunes a viernes me tardo 35 minutos, hoy hice 30, creo que la medida que los empleados públicos entren más tarde es buena, porque mejoraría el flujo vehicular en este lugar”. Este lunes, otros usuarios del transporte no tuvieron tanta suerte y se toparon con la típica trabazón del Bulevar del Ejército, José Castro, desde Soyapango hizo 1:30 minutos para llegar a su lugar de estudio. Sin Embargo, a Álvaro Grande, desde San Jacinto le tomó 10 minutos, movilizarse al mismo destino. Así de contradictorios fueron los relatos del tráfico de este grupo de amigos (Luis Recinos, Jiancarlo del Cid, Álvaro Grande, Steven Barreto, José Castro y Samuel Flores) que estudian tercer año de medicina en la Universidad Alberto Masferrer.
Mientras tanto, en la entrada del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, con una escoba, barriendo las hojas acumuladas desde el fin de semana hablamos con Francisco Sigüenza, un empleado público con más de siete años en su puesto.
“Yo creo que este horario no nos beneficia, al contrario, nos perjudica”, dijo. Añadió que “el Gobierno debería considerar entrar más temprano, debe probar, y no más tarde, yo salí de mi casa en Soyapango a las 6:30 antes salía a la 6:00 y vine acá a las 8:30, creo que el tráfico es peor más tarde y baja en horas de la mañana”, afirmó.
