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@arpassv
En voz del Arzobispo capitalino, online ask la Iglesia Católica rechazó que la Alcaldía de San Salvador le ponga el nombre de Roberto D’Aubuisson a la Calle San Antonio Abad. A veces Monseñor José Luis Escobar Alas defrauda con posturas criticables sobre temas de país, online pero esta vez expresó una posición digna.
El Arzobispo argumentó primero que “no puede quitársele el nombre de un santo” a la Calle San Antonio Abad y porque ésta “tiene un importante significado cultural e histórico” para la población capitalina. Pero después fue más directamente al punto: “Como iglesia somos parte ofendida en el asesinato de Monseñor Romero, los padres jesuitas y otros sacerdotes, las religiosas (Maryknoll) y laicos”, declaró.
Claramente el jerarca católico se refiere a que D’Aubuisson está vinculado con el asesinato de Monseñor Romero y demás delitos cometidos por los escuadrones de la muerte de la extrema derecha, los cuales actuaban en total complicidad con el ejército gubernamental y las fuerzas de seguridad estatales.
“Si me preguntan qué sentimiento tiene la iglesia”, dijo a los periodistas en su más reciente conferencia de prensa dominical, “lo puedo comparar como cuando a una persona le matan a su hermano y quien se supone es el autor intelectual o material de ese asesinato es galardonado”, sentenció el Arzobispo capitalino. “Ojalá que (el alcalde Norman Quijano y su consejo municipal) reconsideren su decisión”, planteó.
Ojalá, pues, que la prudencia se imponga y que Quijano revierta su provocadora y torpe decisión. Cada día crece el repudio popular y surgen voces sensatas en el propio partido ARENA reconociendo que homenajear a D’Aubuisson no contribuye al clima de reconciliación y despolarización política que el país necesita para la gobernabilidad, la paz social y el sentido de unidad frente a los desafíos nacionales del presente.
Los dirigentes y funcionarios areneros deberían seguir el ejemplo de Chile, país que ayer retiró el nombre de Augusto Pinochet a una medalla entregada por la fuerza armada. Retirar el nombre del ex dictador fue solicitado por la propia cúpula del ejército chileno, todo un acto de profesionalismo militar y de rechazo al legado criminal de Pinochet.
La próxima semana un grupo de abogados y organizaciones sociales presentarán sendas demandas de amparo ante la Sala Constitucional para revertir el insulto contra la memoria de las víctimas de violaciones a los derechos humanos perpetrado por Norman Quijano. Los magistrados Florentín Meléndez, Rodolfo González, Sidney Blanco y Belarmino Jaime tendrán que demostrar si están a favor de la democracia o de la impunidad.
