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Nayib y Ulloa reconocen el sistema de partidos políticos

Más allá de las lecturas que se tengan o se hagan por la inscripción de Nayib Bukele y Félix Ulloa, al partido Gran Alianza por la Unidad Nacional, y más allá de los resultados de las primarias en ese partido, realizadas ayer, lo importante es el reconocimiento que los dos polémicos personajes han hecho del sistema de partidos políticos.

Félix Ulloa fue el primero en intentar destruir el sistema de partidos políticos, cuando interpuso en la Sala de lo Constitucional, su cómplice, una serie de demandas de inconstitucionalidad al sistema de partidos políticos.

Ulloa, quien ya había perdido toda posibilidad de lograr algo en los partidos mayoritarios, luego que fuera miembro del Tribunal Supremo Electoral con el apadrinamiento del FMLN y Cambio Democrático, se esforzó por destruir a los partidos políticos.

Y gracias a la coincidencia de pensamiento con algunos de los magistrados de la Sala de lo Constitucional logró que, en el país, se aceptaran las candidaturas independientes que no tuvieron eco en la población salvadoreña.

El actual diputado independiente no es gracias a la voluntad popular, sino a una decisión de la Sala de lo Constitucional que le ordenó al Tribunal Supremo Electoral sumar todos los votos de los candidatos independientes, y quien tuviera más, ese sería el diputado ganador. Esto debería ser motivo de análisis no solo para los políticos sino también para los constitucionalistas.

Nayib Bukele también se enfrascó en esa vorágine de críticas contra los partidos políticos, al rechazar y atacar “la vieja forma de hacer política”.

Por eso, en más de algún momento, Bukele dijo que jamás se uniría a partido político existente, y se atrevió a decir que en GANA o ARENA, jamás, y que su nuevo movimiento político sería distinto a la forma de hacer política.

Muchos ciudadanos de todas las edades se entusiasmaron con el discurso antipartido de Bukele, pero eso ha terminado, pues, independientemente que trate de justificar su afiliación a dos partidos políticos en menos de un mes a sus seguidores, con el discurso que lo hace por “la democracia”, al final lo que ha hecho es reconocer y validar el sistema de partidos políticos de El Salvador, único mecanismo para acceder al poder.

Y que bien que dos personajes que atacaron el sistema político salvadoreño hoy son parte de él, y van a jugar con las reglas democráticas que la Constitución contempla en su artículo 85.

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