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Los Estados miembros del Mercado Común del Sur, hospital Mercosur, repudiaron «todo tipo de violencia e intolerancia que busquen atentar contra la democracia y sus instituciones, cualquiera fuese su origen», ante los hechos de violencia golpista en Venezuela.
La Cancillería argentina dio a conocer anoche mediante un comunicado la postura de esa agrupación de países que componen, además, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela.
El texto subraya que el férreo compromiso de los integrantes de Mercosur «con la plena vigencia de las instituciones democráticas y, en este marco, rechazan las acciones criminales de los grupos violentos que quieren diseminar la intolerancia y el odio en Venezuela como instrumento de lucha política».
A su vez, expresan su más firme rechazo a las amenazas de ruptura del orden democrático legítimamente constituido por el voto popular y reiteran su firme posición en la defensa y preservación de la institucionalidad democrática.
En especial -recalcan- acorde con el Protocolo de Ushuaia sobre compromiso democrático en el Mercosur de 1998.
Igualmente, instan a las partes a continuar profundizando el diálogo sobre los problemas nacionales, en el marco de la institucionalidad democrática y el estado de derecho, tal y como ha sido promovido por el presidente Nicolás Maduro Moros en las últimas semanas.
El mandatario venezolano ha llamado a todos los sectores de la sociedad incluyendo parlamentarios, alcaldes y gobernadores de todos los partidos políticos representados para encauzar una vida de paz y armonía en el país.
Los Estados partes de Mercosur manifiestan, finalmente, «sus más sinceras condolencias a los familiares de las víctimas fatales, fruto de los graves disturbios provocados, y confían plenamente en que el Gobierno Venezolano no descansará en el esfuerzo por mantener la paz y las plenas garantías para toda la ciudadanía».
El pasado miércoles, en Caracas, el mandatario Maduro alertó al mundo que Venezuela enfrenta un plan de golpe de estado contra la democracia y su gobierno y llamó a la solidaridad de los países de América Latina y el Caribe.
La violencia generada ese día por grupos de la derecha venezolana en diversos estados del país dejó como saldo tres fallecidos, incluidos jóvenes militantes comprometidos con la Revolución Bolivariana, y 66 heridos, informó al día siguiente la Fiscal General de la República, Luisa Ortega.
Los lesionados se concentraron en Caracas (nueve), Aragua (41) y Mérida (11), y entre ellos 17 son funcionarios de la fuerza pública y 49 civiles.
La titular del Ministerio Público reveló también que los grupos violentos causaron daños a 54 vehículos, de ellos seis pertenecientes a organismos del Estado y el resto de particulares.
Días después, tuvieron lugar otras acciones violentas de clara manifestación fascista con la intención de desatar un golpe de estado, con el apoyo de mentiras mediáticas de la prensa hegemónica, denunció el canciller venezolano, Elías Jaua.
Escritores se solidarizan con Venezuela
Una declaración de solidaridad con el pueblo y Gobierno venezolanos, a raíz de los actos violentos desatados por la oposición de ese país, fue emitida por el Comité Organizador de la 23 Feria Internacional del Libro, Cuba 2014, minutos antes de la presentación del libro «Antes de que se me olvide», conversación de la periodista cubana Rosa Miriam Elizalde con el actual Secretario General de UNASUR, Alí Rodríguez Araque.
El documento, leído por Edel Morales, vicepresidente de Relaciones Internacionales del Instituto Cubano del Libro (ICL), hace «pública la solidaridad permanente con el pueblo y el Gobierno venezolanos en su lucha por preservar la paz, la justicia social y el buen vivir».
«Manifestamos enfáticamente nuestro más enérgico rechazo a la violencia fascista de ciertos grupos de la derecha venezolana, oscuramente vinculados a la extrema derecha continental e internacional, que pretenden crear condiciones para la ejecución de un nuevo golpe de Estado en la República Bolivariana de Venezuela, contando para ello con la manipulación intencionada de la opinión pública que realizan algunos medios de comunicación», indica la declaración del evento que reúne en La Habana a autores, editores, libreros y otros agentes del libro procedentes de 42 países de todos los continentes.
A dos semanas de la Declaración de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, realizada en la Cumbre de la CELAC, el Comité Organizador, presidido por Zuleica Romay, presidenta del ICL, rechaza las acciones, que atentan contra la estabilidad y a la paz en la región.
