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Londres/dpa
El Arsenal empató hoy 3-3 con el West Ham pese a tener una ventaja de dos goles en la primera mitad y desperdició una gran ocasión para acercarse al Leicester, el líder de la Liga inglesa de fútbol.
El alemán Mesut Özil (18′) y el chileno Alexis Sánchez (35′) adelantaron a los «gunners» en el estadio de Boleyn Ground, pero Andy Carroll, con una ráfaga de dos goles (44′ y 45+2′), empató el duelo justo antes del descanso.
Carroll, el gran protagonista, puso el 3-2 en el marcador en el minuto 52 y Laurent Koscielny anotó en el 70′ el gol que cerró el cambiante partido.
El Arsenal, que tiene aún un encuentro pendiente, está tercero de la Premier League con 59 puntos, tres menos que el Tottenham y a diez del Leicester.
El líder de la clasificación se medirá mañana al Sunderland por la trigésimo tercera jornada, mientras que el Tottenham recibirá al Manchester United.
«Ganar el título es ahora mucho más difícil. Hoy perdimos dos puntos y habrá que ver qué resultados se dan el fin de semana», dijo el entrenador del Arsenal, el francés Arsene Wenger, a la televisión BT Sport.
«Es una decepción para nosotros», agregó el técnico. «Especialmente con jugadores de esa experiencia. Ir 2-0 en el minuto 43 e irte al descanso con 2-2. Pagamos por nuestra debilidad en los balones aéreos en el área».
El West Ham extendió a 14 su racha de partidos invictos como local en la Liga inglesa para mantenerse en el sexto lugar, a dos puntos del cuarto, un Manchester City que se mide más tarde al West Brom.
«Fue un partido duro», dijo Carroll. «Seguimos en la lucha por el cuarto puesto».
Alex Iwobi asistió a Özil y a Alexis en dos acciones similares para que el alemán y el chileno pusieran en ventaja al equipo de Wenger.
Sin embargo, Carroll cambió el encuentro en 160 segundos. Un remate de cabeza a un centro de Aaron Cresswell y después un disparo tras un rebote en el área metieron de nuevo a los «hammers» en el partido.
Carroll completó su «hat-trick» con otro cabezazo en el comienzo de la segunda mitad, antes de que Koscielny marcara el 3-3 definitivo a 20 minutos para el final.
«Fue un gran partido de fútbol y estoy muy orgulloso de este equipo», dijo el entrenador del West Ham, Slaven Bilic. «Mostramos carácter, espíritu de equipo y la capacidad de remontar».
«No estoy feliz con el hecho de haber conseguido sólo un punto, pero estoy feliz por todo lo demás».
En otro de los encuentros de la jornada, el Chelsea sufrió su primera derrota en la Premier desde la llegada del entrenador holandés Guus Hiddink en diciembre de 2015 al caer 1-0 en el campo del Swansea.
Actual campeón de la competición, el Chelsea encadenó 15 encuentros sin conocer la derrota desde que Hiddink sustituyó a José Mourinho, destituido por malos resultados.
La derrota deja a los «blues» más lejos de los puestos que dan acceso a las competiciones europeas. Están actualmente décimos con 44 puntos, a ocho del último lugar que entrega una plaza para la Liga Europa.
El gol del Swansea, décimo tercero de la tabla, lo anotó el islandés Gylfi Sigurdsson en el minuto 25. Es la primera victoria que el conjunto galés logra sobre el Chelsea en la Premier.
El Aston Villa, por su parte, quedó virtualmente descendido a la segunda división al caer 2-1 como local ante el Bournemouth. Fue la octava derrota consecutiva del Villa, que se encuentra a 15 puntos de la zona de salvación con cinco encuentros por disputar.
Steve Cook y Josh King marcaron los goles del Bournemouth, que quedó a un paso de asegurarse su permanencia por segunda temporada consecutiva en la Premier League, mientras que Jordan Ayew descontó para el conjunto local, el primer gol del Aston Villa en cinco partidos.
Durante el inicio del encuentro, los aficionados del Aston Villa permanecieron fuera del estadio en protesta contra el dueño del club, Randy Lerner. Además, abuchearon al equipo y sacudieron pañuelos para expresar su disgusto con la pésima temporada del equipo.
«Haber marcado un gol es un pequeño consuelo. Debemos mantener el profesionalismo hasta el final», dijo a la BBC Eric Black, entrenador interino del equipo. El técnico del Bournemouth, Eddie Howe, reconoció que «fue un partido duro» a raíz de la «atmósfera tóxica» que se vivía en el estadio.
También quedó comprometido el Newcastle de Rafael Benítez, que cayó hoy 3-1 ante el Southampton y continúa penúltimo.
Shane Long, Graziano Pelle y Victor Wanyama marcaron los goles del conjunto local y dieron un duro golpe a los «Magpies». El equipo de Benítez suma 25 puntos y se encuentra a seis de la zona de salvación.
El Crystal Palace puso fin a una racha de 14 encuentros sin victoria al vencer 1-0 al Norwich y se alejó de los puestos de descenso. En el restante partido, el Watford y el Everton empataron 1-1.
