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Caralvá
Fundador
Suplemento Tres mil
La expresión artística y cultural de nuestra nación nunca ha dejado de expresarse aún en los peores momentos del autoritarismo militar durante el Siglo XX, el conflicto y la época posterior a la guerra civil enmarcado en los 25 años del Acuerdo de Paz se expresa en diversas obras, que pueden clasificar a los intelectuales a favor y en contra de la modelo social e incluso quienes prefieren un posición fuera del conflicto social, pero este panorama ¿acaso no es el de la humanidad? El arte refleja la realidad, religión, pirámide social, belleza, guerra, tragedia etc. bajo la óptica de quién fotografía, dibuja, escribe etc. nuestra sociedad en esos años horrorosos no es excepción, así nuestro periplo de traslación ha llegado a la paz, que aún no es la concepción plena de “Paz Social” no obstante existe la realidad de la alternancia política en el ejercicio del poder, de igual forma la participación política plural.
Si la constante del arte es una de las tendencias antes mencionadas: a favor del cambio social, en contra o neutral, poseemos en el “ente” la expresión material del Ser que en los pintores es por ejemplo su acuarela, en él leemos su expresión social en forma instantánea. ¿Podríamos incluso resumir que se lucha contra el sistema capitalista? ¿Acaso se defiende el sistema capitalista? ¿o solo pensamos en la utopía de una república en otro planeta?. Uno puede clasificar entonces a legiones de estrellas blancas, rojas, oscuras, violetas, azules, etc., después de 25 años de paz, es tiempo de reconocer que las palabras: heroísmo, coraje, honor, Patria, revolución, constitución, caben en cada una de las expresiones humanas, de igual forma su lado oscuro; la guerra es sangre, la guerra es el peor drama que un pueblo puede vivir; dentro de las causas que motivaron el conflicto podemos caracterizar la ausencia democrática prolongada e injusta, el arte también sufrió ausencias… notables vacíos de autores silenciados por los motivos señalados. También se mata con el silencio político al no publicar su obra, sus pinturas, esculturas o negar su calidad artística.
Fue una generación odio y venganza en ese amargo conflicto que aún permanecen palpitando en muchas almas sedientas de otra guerra, a pesar que el arte ha reflejado con su máxima expresión todas las opciones antes señaladas, el arte al final no miente, es la expresión del “Ser” de los autores, son sus óleos, poemas, escritos, reflejan su espíritu al servicio de un ideal cualquiera que sea.
Al menos para nuestro modesto consuelo ha existido el Suplemento Cultural 3000, instrumento constante durante 26 años como un modelo plural del arte, en forma más humilde Literatura Stereo también ha rescatado parte de las expresiones artísticas de aquellos tiempos; no obstante sus aportes registrados y demostrables son un aporte valioso a la identidad salvadoreña, en cierta forma han resguardado ese crucial momento de nuestra historia. Ahora respondemos al desafío: ¿qué hicieron por nosotros?… un suplemento cultural impreso, un primer semanario cultural hablado y además compartimos la alegría de construir la paz en plena guerra civil. No olvidó mencionar que es un privilegio vivir en esta nación, construir el momento histórico y compartir la solidaridad por un mundo mejor sin excepciones.
