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En los tres años del Gobierno del Presidente Salvador Sánchez Cerén se han invertido siete mil millones de dólares en el área social. Es decir, el 48% del Presupuesto General de la Nación.
Esta inversión existe, no obstante la campaña de ahogamiento financiero de parte de la derecha, léase partido ARENA, Sala de lo Constitucional y el sector empresarial que se niega a ponerse al día con el fisco.
A lo anterior hay que agregarle que en la Asamblea Legislativa, en los tres años, ARENA se ha negado a dar los votos para el Presupuesto General de la Nación. Es decir, ARENA se ha opuesto a que se invierta el 48% del mismo en beneficio de la población salvadoreña.
En su acostumbrado informe de labores, el Gabinete Social detalló, ayer, que se capacitó a 33.465 maestros gracias al Plan Nacional de Formación Docente; que atendió a 98.113 personas a través del Programa de Alfabetización, que dejó 70 municipios libres de analfabetismo.
Que 158.543 personas fueron beneficiadas con las modalidades de educación flexible. Que el 32% de los centros escolares recibieron dotación de mobiliarios, rehabilitación o reparaciones en infraestructura. Que se entregaron más de 38 mil computadoras a 1.802 centros educativos.
Un total de 5.154 escuelas reciben el paquete escolar, el programa Vaso de Leche llegó a 3.010 centros educativos y el programa de Alimentación y Salud Escolar atiende a 1.2 millones de estudiantes de 5.109 escuelas.
Y en cuestiones de salud 2.5 millones de personas mejoraron su acceso a servicios médicos, entre otros beneficios.
Los datos son claros, y que benefician directamente a la población, sin embargo, ARENA y la Sala y la ANEP insisten que en el país hay despilfarro. ¿Cómo puede haber despilfarro cuando el 48% del presupuesto general de la nación se invierte en educación, salud, entre otros?
¿Cómo es posible que un partido político se niega a no aprobar un presupuesto cuando la mitad del mismo va para lo social?
Pero algo más grave ¿Cómo es posible que el partido ARENA arguyendo la Ley de Responsabilidad Fiscal obligue al Gobierno a reducir el presupuesto en Educación, Salud y Seguridad?
Pero que bueno que pese a las trabas sistemáticas que ARENA y la Sala de lo Constitucional le han puesto al Gobierno para ahogarlo financieramente, no haya evitado que el Gobierno del Profesor Sánchez Cerén, el segundo Gobierno del FMLN, hay invertido casi el 50% del presupuesto en lo social. Esta es la naturaleza de los Gobiernos de izquierda, su apuesta en lo social, y esto es lo que ataca la derecha, con el cuento del despilfarro.
