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Poemas de Anna Delmy Amaya

La casa inamovible

Asentada en el mismo espacio

de las tristezas y alegría quedadas,

En el jardín, ansias e ilusiones

sembradas junto a las rosas

que extienden las manos hacia  las siluetas ausentes

Los recuerdos se desvanecen

a veces se esconden en los pasillos;

en las escaleras hay cirios

que van recorriendo los túneles ocultos

de la deslealtad y las injurias de días que se fueron;

en los balcones barrocos

cuelgan los sueños de gloria , percudidos

por la codicia, la mentira

y la delincuencia de la generación perdida.

Guardo alegrías y nostalgias propias

en las veraneras sin nombre,

habitaciones renovadas

y en  los pilares expectativos

que llevan  impresas, palabras de oro puro

con el frescor de los meridianos

de la vida, de una provincia transformada

¡sólo un patrimonio!

estrangulado por el tiempo

y eternamente palpitando

en las vertientes del tiempo

que se desparrama

sobre el mundo y sus fronteras.

 

Lunas de noviembre 

( Para mis hijas, Debbie y Dulce)

Niñas,

Lunas de verano

encendidas y vibrantes

un hilo de luz roza sus manos

Y el brillo de sus ojos.

Niñas,

lunas de noviembre

sobre mi nombre enamorado

 

Mayo PADREMADRE

La lluvia de este día

me llevó HASTA  mayo,

al mayo florido ,

al mayo blanco

con repuntes de inviernos,

donde los recuerdos

se hacen intensos, atrevidos y gloriosos

Mayo,

mes verde

con vahos amorosos en las calles empedradas,

mayo de mi pueblo silvestre,

mayo de besos escondidos

y enredaderas, exóticamente verdes.

Mayo, padre madre

mayo de cúpulas blancas

con aretes de campanarios

que siguen repicando

la plenitud de los años cortos.

 

Vicio

..y…

Este vicio de abrazarte, poesía

de besarte las sienes y los sueños

Poesía sin edades,

esperanza de mirada larga

en días de árboles sin estrellas

y noches crecidas

Patria resucitada

El día cierra sus puertas,

Llega la noche con su agonía de voces..

y.. se abren los cristales de los países vivos

Nuestra patria gime

Y todos nos dolemos de su llanto..

Las horas en su recorrido voraz,

completan su recorrido

y el nuevo día abre las puertas

frente al rubor de los expectativos  rostros

que miran asombrados

a la PATRIA NUEVA

RESUCITADA Y GLORIOSA

 

Caminos de la historia

Aquel  río

con su rumor constante

aquellos uvillos colgantes

hasta besar las aguas

aquellas piedras enormes y pulidas,

soñando noche y día,

aquella felicidad de niña, arrullada

por el rumor de vida.

Aquella alegría ¡tan grande, tan grande!

se quedó palpitante

en los caminos de la historia

El último beso

El último beso tuyo

se alargó con la longitud del tiempo,

Y de los vendavales que cruzan

los océanos de tus ojos.

El último beso tuyo.

aún palpita

en la piel de la mañana,

en los labios de las noches,

en cada camino de los recodos andados,

en cada célula transformada

Y en el reflejo

de tus labios

sobre mi rostro incierto

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