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Literatura salvadoreña en Holy Names University

Caralvá

Fundador

Suplemento Tres mil

 

El 12 de septiembre en la ciudad de Oakland, California, visitamos aquella hermosa universidad, me esperaba la maestra Martivón Galindo junto a sus alumnos.

Serían las 5:00 p.m de la tarde cuando ingresamos al campus ubicado entre bosques con calles espaciosas y facultades de humanidades,  me parecía un escenario de película clásica nórdica, con árboles de conífera y baja temperatura.

Había preparado la ponencia, era un tema enciclopédico: La lucha de clases en América Latina; un dilatado tema que me recordó las clases teóricas y mis maestros de la UNAM y la ENAH de México, aquellas sesiones eran sin límite de tiempo en los años ochentas, pero adelantaban el colapso de 1989 puesto que los académicos conocían perfectamente las tendencias y predecían ese destino; de tal forma que al quebrarse el sistema no fue ninguna sorpresa, no fracasó la solidaridad, fracasó el modelo productivo y el colectivismo. De tal forma recurrí a los estudios del PNUD en los últimos años, que caracterizan los niveles de vulnerabilidad, pobreza, clase media y el residual, que al menos dibujaba el inicio del siglo XXI por sus ingresos económicos, ese estudio grafica el dominio del nuevo capitalismo universal con sus enormes diferencias materiales. La mención de autores norteamericanos, junto a escuelas de pensamiento positivistas, estructural funcionalistas y neomarxistas fue suficiente para que sus trabajos exaula se enriquecieran. No obstante se trataba de reflejar aquella condición del siglo pasado en nuestra nación, de tal forma que bajo ese criterio elegí a cinco autores con su obra y su vida, connotando la lucha de clases desde el siglo pasado: Roque Dalton, Monseñor Oscar Arnulfo Romero, Ignacio Ellacuría, Rafael Lara Martínez y David Escobar Galindo,  me parece que es incompleto pero alude los objetivos académicos, imagino el continente de lectura que les generaría este proyecto, acompañado del insomnio si les piden caracterizar a cada uno… ¡Ojalá! aprueben el examen de fin de ciclo.

Concluí la exposición con un breve sumario del Suplemento Cultural 3000 y mi obra que es posible encontrarla en amazon.com/author/csarcaralv; para ello construí un inventario fotográfico desde el primer número de 1990 con muestras de algunos años y los más recientes, refiriendo a Línea Artistas Salvadoreños en San Francisco, al menos la proximidad de compartir conocimientos es posible, puesto que los medios digitales permiten la interacción y ahorran tiempo.

Las referencias sobre nuestro Diario Co Latino despertó en ellos la simpatía hacia los trabajadores, dentro un modelo capitalista que ahoga a los pobres con muchas carencias materiales, era como regresar al inicio de la exposición, con el tema lucha de clases en América Latina y el estudio de los niveles de ingresos en los grupos sociales.

Los estudiantes mostraron una gran admiración por nuestras formas de comunicación social, se interesaron incluso en pequeños formatos impresos, documentos de circulación interna y formas de interacción digitales posibles en esas universidades, fue un instante de conjugación de voluntades, aquellos alumnos norteamericanos expresaron su admiración por nuestras obras literarias.

Agradezco a esa institución la oportunidad de compartir y divulgar nuestra cultura en Estados Unidos.

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