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@GloriaCoLatino
La Casa Comunal de El Mozote ha cambiado el silencio a su interior hay gritos, shop risas, danza y música, es una especie de fiesta cultural preparada por niños, niñas, adolescentes y jóvenes para darle la bienvenida y una muestra de amistad, ante la visita de la Compañía de Teatro Infantil cubano “La Colmenita”.
“Nos han impactado”, dijo Carlos Alberto Cremata, el fundador de “La Colmenita”, luego de una representación teatral juvenil de la masacre que quitó la vida de más de mil personas entre mujeres, hombres e infantes en El Mozote y otros caseríos circunvecinos, en 1981.
La tierra roja del Caserío El Mozote en el municipio de Meanguera, Morazán, aún permanece inalterada en el tiempo; sus monumentos memoriales guardan los más de 900 nombres de los adultos, y en el Jardín de la Reflexión “Los Inocentes” los nombres de 460 víctimas infantiles que yacen en el ex convento de la iglesia.
Actualmente, este grupo de adolescentes y jóvenes que integran el Grupo Cultural de El Mozote retomaron este pasado violento a partir de las narrativas de abuelas y abuelos; convirtiéndolas en diversas expresiones de arte para conservar la “Memoria Histórica” del país.
“Estamos acostumbrados a visitar lugares y reunirnos con los niños y las niñas para jugar al teatro es una costumbre nuestra -pero aquí- es especial, nos ha golpeado la historia del lugar que es muy fuerte, pero también nos gusta que nos recibieran con la cultura y todo la obra de teatro, la danza y música que presentaron nos ha acariciado mucho el corazón”, dijo el director de La Comelnita.
La visita del teatro infantil “La Colmenita” no es aislado, SECULTURA ha trabajado durante un año con grupos juveniles y especialistas en diversas expresiones del arte. “La Colmenita” es un proceso integral para incorporar a la niñez y juventud en un trabajo colectivo basándose en los valores morales como la solidaridad, el respeto y la paz. “Nosotros pensábamos incorporarlos en la representación de una obra que estrenaremos en enero (2016) en los Teatros Nacionales de San Salvador, San Miguel Y Santa Ana … pero ahora viendo lo organizado que están -se nos ha ocurrido- que Paty y Lisbet, quienes se van a quedar acá con ustedes preparen la obra que nos han presentado y también se incorporen en la obra de la Cucarachita Martina, que es una historia a nivel iberoamericana”, expresó Cremata.
La obra de la “Cucarachita Martina” es conocida en otras latitudes como la “Ratita Presumida” que la constituye una serie de escenas de una obra musical que se interpreta en ritmos pegajosos de los países iberoamericanos.
“Todo será un juego, nosotros no damos clases de teatro… vendremos el primer sábado de diciembre y todos los que anoten van a comenzar con la primera escena y les aseguro que se van a divertir contando historias, cantando y cuando ingresen los otros personajes como el Gallo Malayo, el Chivo Nativo, el Oso Roñoso, Ratoncito Pérez, la Lechuza Sacerdotisa, Don Loro de Oro y la Calandria es por eso que los invitamos a todos y todas a que participen y diviertan”, agregó.
César Pineda, Director de la Casas de la Cultura Viva Comunitaria de la Secretaría de la Cultura (SECULTURA), agradeció la visita del proyecto social “La Colmenita”, ya que permitirá a la niñez y juventud de El Mozote participar en actividades lúdicas y arte creando a su vez, solidaridad y cohesión de los pobladores en El Mozote.
“Nos encanta todo el trabajo que han presentado y que muestra que el trabajo de hace un año que vinieron los mexicanos, ahora vienen conmigo los hermanos y hermanas cubanas para darles a conocer su proyecto de teatro infantil que inicia el próximo sábado de diciembre”, informó.
Sobre la puesta en escena de la “Cucarachita Martina”, Pineda indicó, que las maestras cubanas Pati y Lisbet se encargarán de preparar y dar los talleres de teatro infantil junto a coordinadores y el trabajo de las madres de familia para construir un tejido social entre todos y todas las participantes.
“Los ensayos finales serán el 28, 27 y 29 de diciembre, porque en enero presentaremos una gran obra de teatro la -Cucarachita Martina Sueña con la Convivencia y la Paz- , en esta obra habrá un aproximado de 90 entre niños y niñas, porque junto a ustedes, tendremos el Coro del Buen Vivir y vendrán 20 niños desde Cuba, para actuar junto a ustedes, será emocionante. Así que, les pido a mamás, coordinadores y todos ayudar a que esto llegue a buen término”, reiteró.
“La Colmenita” siempre busca la integración de los y las participantes. Cremata agregó que los niños cubanos ingresan a este teatro infantil desde los 3 años de edad, y dominan muy bien toda esta obra de la “Cucarachita Martina”.
“Ellos vendrán desde Cuba para quitarse esa piel de los personajes y dárselas a ustedes y soñamos que algún día vayan a Cuba … tenemos Colmenitas en Colombia, Nicaragua, Panamá, Argentina, Venezuela… tendremos pronto en Costa Rica y como estamos cerquita tal vez, podemos unirnos todas las Colmenitas –ese es un sueño de César y mío- donde todas las Colmenitas se unan en un festival”, manisfestó.
Sobre el proyecto de La Colmenita en el país, Cremata indicó que se extenderá en los 14 departamentos y destacó algunos como en los municipios de Jiquilisco, Usulután y Soyapango, San Salvador.
Patricia Gómez es graduada de la Dirección Coral de la Escuela Nacional de Arte de Cuba, cuenta con una experiencia de 25 años y es de las fundadoras de “La Colmenita”. “El teatro es la herramienta que utilizamos para crear familia y nosotros mediante el teatro lo que hacemos es unir a los niños y niñas con sus familias para crear valores, convivencia pacífica y fortalecer la autoestima de los y las niñas en lugares en donde no está sólida y demostrarle que si pueden, que si tiene un espacio donde estén viviendo pueden hacerlo muy bien. Más que hacer teatro creamos valores”, explicó.
Yasmín, de 6 años, corre feliz entre las sillas y saluda a Patricia. Desde el próximo sábado Yasm{in será una alumna y lo sella con un abrazo a su maestra. “Esta obra que presentaron los adolescentes y jóvenes es muy conmovedora ,y estoy impactada porque fue bien fuerte lo que ocurrió en este lugar – y como la cuentan- creo que la sienten porque se trata de sus seres queridos quienes les han contado la historia… sabemos que esa tristeza no la podemos desaparecer… porque un ser querido no se puede olvidar, pero les podemos dar las herramientas para crear y expresarse desde el arte”, puntualizó.
