Página de inicio » Editorial » De percepción y realidades

De percepción y realidades

La percepción es explicada como un espejo de la realidad, clinic que se logra con la mediación de los sentidos y el contacto de estos con la realidad (lo objetivo). Ese contacto, pills por lo tanto, help forma parte de un proceso  que combina, necesariamente, elementos objetivos y subjetivos.

De ahí que la percepción no necesariamente debe ser totalmente objetiva, ni totalmente subjetiva. Lo que si se puede afirmar es que la percepción es manipulable, sobre todo, cuando intervienen otros actores como mediadores, como por ejemplo, los medios de comunicación, o cuando hay otras partes interesadas (partidos políticos, empresarios, otros grupos de poder).

El tema de la violencia delincuencial en el país, por ejemplo, sobre todo en los cinco años del Gobierno del ex presidente Mauricio Funes, y más concretamente en el periodo electoral recién concluido, fue manipulado por los medios y otros grupos de poder, para crear la percepción en la ciudadanía, de que en El Salador, el pueblo era presa de la delincuencia, que cada centímetro es inseguro, pero, fundamentalmente, que de  continuar el FMLN en el Gobierno, la situación seguiría igual o peor.

Los medios de comunicación, en su gran mayoría de derecha, respondían, por supuesto, a los intereses del partido de derecha, del gran empresariado salvadoreño, que hizo del tema de los homicidios y extorsiones, un tema electoral, y por lo tanto, un factor para la lucha ideológica.

Sacar portadas en los periódicos sobre temas de homicidios, o llenar sendos espacios en la televisión de estos hechos, sin contextualizar, no era otra cosa más que manipular a las audiencias en sus percepciones.

Recientemente, el Ministro de Seguridad y Justicia, Benito Lara, dio a conocer un estudio, en el que demuestra que en lo que va del presente año, en más de 70 municipios no ha habido ningún homicidio, que en 43 se han cometido al menos un asesinato y que en solo 63 municipios ocurren el 80 por ciento de los homicidios.

No obstante, en el tratamiento mediático de este tema, no se hace esa diferenciación, pues no les interesa, en tanto que lo que se busca es que la ciudadanía crea que en El Salvador todo es inseguro, cuando los datos, la realidad, indica que hay  municipios con cero delincuencia.

Si la percepción se forma en el imaginario colectivo de los salvadoreños y salvadoreñas, a partir, mayoritariamente de los medios, entonces, lo que tendremos es que, hasta los y las ciudadanas que viven en los pueblos más tranquilos de El Salvador se sentirán atemorizados.

Es decir, si queremos cambiar la percepción interesada sobre la inseguridad, es necesario no solo combatir la criminalidad, sino también contribuir a las percepciones ciudadanas, con otros mecanismos comunicativos y periodísticos, sin dejar de tener claridad que en  el terreno de la información periodística, en particular, y comunicacional, en general, es derecho de la disputa ideológica en las democracias.

Ver también

Las contradicciones de Nayib Bukele

Este editorial debería titularse “las prioridades de Nayib Bukele” o algo parecido. La verdad es …