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Madrid/dpa
El Real Madrid afrontará el clásico del sábado ante el Barcelona con seis puntos de ventaja sobre los azulgranas, tras empatar 1-1 ante la Real Sociedad después de ofrecer su peor imagen.
La decimotercera jornada fue la previa al gran encuentro del Camp Nou, al que el Barcelona llegará profundamente exigido. No sólo por su desventaja ante el líder, ahora aumentada, sino por su bajo estado de forma.
Porque el Barcelona fue ampliamente superado por su rival. Sólo la ineficacia, la fortuna y un error arbitral privaron a la Real Sociedad de la victoria.
El Barcelona estaba avisado después del triunfo 2-1 del Real Madrid el sábado ante el Sporting de Gijón y los seis años que llevaba sin ganar en Anoeta. Pero no se tomó el encuentro con la agresividad que requería la cita.
El conjunto vasco fue un ciclón en la primera parte y “fue milagroso que llegara el descanso sin goles”, según reconoció el propio Luis Enrique al finalizar el encuentro. El Barcelona no sumó ni una sola llegada al área local.
El delantero brasileño William José adelantó a la Real Sociedad a los 53 minutos, aunque Lionel Messi igualó seis minutos después al completar una gran acción de Neymar. Demasiado premio para los azulgranas.
La jugada polémica ocurrió a los 76 minutos, cuando Vela disparó al travesaño y el rebote fue para Juanmi, quien marcó.
Le anularon el gol por un fuera de juego que no existió. Poco después, Vela estrelló otro balón en la madera.
El Barcelona se marchó de Anoeta con un punto que no mereció y con la preocupación propia de un equipo que marcha ya a seis puntos del líder y con la necesidad casi desesperada de ganarle el próximo sábado.
Igualado a 27 puntos con los azulgranas está el Sevilla y a tres de ellos aparece el Atlético de Madrid, que recuperó la esencia de su juego tradicional -solidez defensiva y eficacia ofensiva- para golear 3-0 en campo de Osasuna.
Diego Godín y Kevin Gameiro adelantaron a los visitantes en la primera parte y Yannick Carrasco completó la goleada ya al final. De esta forma, el Atlético de Madrid dejó atrás dos derrotas consecutivas.
Osasuna es penúltimo, con apenas siete puntos y dos derrotas bajo el mando de Joaquín Caparrós, su nuevo entrenador.
Tampoco le fueron bien la cosas al Villarreal, que cayó 2-0 en casa contra todo pronóstico ante el Alavés, merecedor del triunfo.
El partido se decidió en la primera parte gracias a los goles de Ibai Gómez, a los ocho minutos, y Víctor Camarasa, diez más tarde.
El triunfo permitió al equipo de Mauricio Pellegrino ascender a la decimotercera posición de la Liga española con 16 puntos, mientras el Villarreal se quedó sexto con 22.
En otro encuentro, el Celta superó 3-1 a un Granada que se hunde en la última posición.
La decimotercera jornada de la Liga española se completará hoy con el duelo entre Las Palmas y Athletic de Bilbao.
